Psiquiátrico Barrow Gurney

El hospital psiquiátrico fue uno de los pioneros en implantar terapias como el electroshock. Contaba con numerosas instalaciones para los pacientes incluyendo lugares residenciales.

Frente de Somosierra

Nos acercamos a un paraje en el que se vivió una de las primeras batallas de la Guerra Civil.Recorremos el frente en busca de bunkers, trincheras y cualquier vestigio que pueda quedar.

Château Noisy

Este impresionante palacio construido por una familia noble francesa, yace hoy totalmente olvidado. Nadie recorre sus innumerables estancias ni sube por su impresionante escalinata.

Preventorio abandonado

Interminables pasillos y terrazas recorren este inmenso edificio donde antiguamente se suministraban tratamientos contra la tuberculosis a niños y adultos.

Valdegrulla

Valdegrulla es uno de los innumerables ejemplos de despoblación de nuestra península. Abandonado en 1997 dejá atras una interesante historia y un gran ejemplo de arquitectura popular.

1 de mayo de 2025

La Iglesia Solitaria

 Ni los lugares sagrados están a salvo del olvido. En esta iglesia todo lo que podía desaparece ha desaparecido, dejando poco más que un esqueleto vacío tras de sí.


 La entrada principal ya sólo sirve para que pase la luz por ella.

 



A la derecha, en dirección a la cabecera todavía resiste el confesionario, que te espera para que tus pecados puedan ser escuchados y perdonados.



 Y a la izquierda está la subida a coro y la torre, donde iremos después.

 


 Pero antes veamos todo en su conjunto y acerquémonos a la cabecera, donde se encontraba el humilde altar mayor

 



 Junto al altar está la sacristía, donde quedan los últimos objetos reconocibles como la cajonería sin cajones.

 


Volviendo atrás nos dirigimos al coro, pasando antes por el púlpito que suponemos que cayó en desuso hace mucho más tiempo que la propia iglesia.

 


 A los pies de la iglesia está el coro, que nos da otra perspectiva del edificio. Igual que sucedió con el púlpito, la barandilla metálica desapareció

 




Y sólo nos queda subir al campanario, donde hasta la propia campana también ha desaparecido.