Por desgracia no hemos podido encontrar mucha historia del lugar. Se puede suponer que esta fábrica ha sido víctima de la mala situación del sector lácteo en España. Perder estas industrias nos perjudica a todos.
Nosotros comenzamos la exploración en el aparcamiento, como cualquier trabajador.
Hay numerosos edificios que explorar, y el que tenemos más cerca es el principal. Por el camino vemos la complicada estructura de tubos necesaria para la pasteurización de la leche.
Con los tubos como guía, entramos en el edificio principal.
Y siguiendo más tubos llegamos a la sala más grande. Aquí los tubos y los intercambiadores de calor tienen diferentes colores.
No sólo encontramos tuberías. También quedaba algo del sistema eléctrico, cosa rara sabiendo lo goloso que es un lugar así para los amigos de lo ajeno.
En caso de urgencia, uno siempre puede echar mano de... ¿Toyota? ¿O Fujitsu?
Desde el edificio principal pasamos a la sala de calderas.
Reflejos en el aceite...
El siguiente edificio que visitamos fue la báscula.
Y desde allí pasamos a los talleres de mantenimiento.
Nos queda una parte por explorar: los depósitos exteriores.
Con esto terminamos una exploración de un lugar bastante interesante, y sobre todo una quedada que disfrutamos mucho. ¡Un saludo a todos los que nos acompañaron ese día, que no fuimos pocos!